Alma canina





He descubierto el trabajo de la fotógrafa Erin Vey y me ha sorprendido gratamente. Erin tiene dos amores: los perros y la fotografía, además, por ese orden. Gracias a la suerte, ha conseguido convertir sus dos pasiones en su profesión. Ella siempre ha estado rodeada de mascotas; en su casa, era frecuente la convivencia con dos o tres perros a la vez, y en cuanto a su labor, empezó haciendo retratos a personas y gracias a eso, la experiencia acumulada, le ha servido positivamente cuando ha tenido que inmortalizar a las mascotas con sus amos. Aunque prefiere fotografiar a los perros en solitario. "Mi verdadera vocación era la de captar la esencia y la personalidad de los perros", dice, algo que hace muy bien.

Comentarios